Nicolás Villavicencio Tejo escribe en Hiedra para reflexionar sobre la tercera fecha de Ciclos Vitales y desplegar algunas conclusiones sobre el ciclo de NAVE y Sala de Máquinas. (puedes revisar aquí el texto de la primera y segunda)

Nicolás Villavicencio Tejo

Investigador escénico

Ciclos vitales terminó sus transmisiones el viernes pasado viernes 20 de noviembre, dando un final preciso y propio de una propuesta digital y escénica con todos los elementos que fueron avisados en la previa a su estreno, sin más ni menos.

Ciclos vitales zanjó una estructura curatorial que acordonó la invitación por medio del enlace entre artista y espacio, la audacia de no franquear un camino preciso en cada trabajo y la capacidad de sintetizar aquello vital para la existencia del evento. La unión de dos formas de entender la gestión y el arte que dieron como resultado tres transmisiones con seis propuestas: contenidos sobrios en sus exposiciones.

Como primera conclusión, dirimiendo herencias acerca de cómo convocar cuerpos e ideas sobre la base de la improvisación, organigramas conceptuales y más, ciclos vitales, habilita un espacio para que esto se repita reiteradamente. No es necesario que sea un ciclo exclusivo de Sala de Máquinas ft. NAVE, sino ambos espacios aportando a otras zonas. Cada franja con lo que pueda.

En cada una de las apariciones dedujimos que el respeto hacia el logos asoma, pero también brota la precisión de estirarlo, modificarlo. Podríamos edificar un planteamiento de escuelas como parte de esta curaduría, pero es evidente que algo así nunca fue cercano un esbozo como este. Ni esto, ni nada que precediera las voluntades de sus sostenedoras: María José Cifuentes y Alexandra Mabes, provenientes de formaciones múltiples, una desde la historia y la otra desde la danza. Este indicador es muy potente ya que definitivamente el cuerpo, ha sido indudable fracción de sus investigaciones, apostando también a la sorpresa en cada entrega realizada por los artistas invitados, ya que no fueron condicionados por disposiciones curatoriales más allá del nombre del programa.

Una segunda conclusión sería esperar próximas colaboraciones de ambos espacios con otros territorios o, idealmente, ver estas obras en directo y refundar las experiencias en lo realmente necesario para las artes escénicas, el acto en vivo.

Quizás lo realmente importante sea que una curaduría de artes escénicas con estas características, siendo aporte indudable para la danza nacional, no tiene por que respetar ciertos dogmas del concepto mismo de curatoría tal como lo hemos heredado de las artes visuales más convencionales. Este ciclo y los cuerpos exhibidos habitan muchas más dimensiones obligando a fundar no sólo los criterios, sino también las estructuras en la apropiación del concepto.

Desde este último punto deslizamos una tercera conclusión vital: esta unión de campos semánticos, NAVE y SDM, han dado un paso significativo al contemplar a las audiencias que no llegaron a tiempo, a disfrutar y absorber los Ciclos Vitales.

En esta última y final transmisión, contamos con la presencia de Nury Gutés y Carla Bolgeri.

Sobre el trabajo de Bolgeri, podemos concluir una apuesta bastante lógica desde lo que la artista viene trabajando, En lo profundo es cómo ha sido nombrado este trabajo en el que aparece un efecto lumínico respecto al material utilizado, con tonos azules eléctricos sobre un papel plástico, al parecer transparente. La performance de Bolgeri transita entre representaciones de sofoco y deseos de dominar este material incandescente con una sonoridad lóbrega y electrónica.

Nury Gutés, quien abre esta transmisión, nos sorprende una vez más con una composición original y desmandada llamada METOPAS, alusivo a aquella pieza arquitectónica clásica rectangular de origen griego que decoraba grandes construcciones con imágenes talladas en piedra, que relataban sucesos históricos o mitológicos.

No es necesario indagar en el origen del concepto. Es justamente METOPAS de Gutés un armazón de imágenes y escenas muy condensadas en nuevos lenguajes respecto a lo que hemos visto de la artista.

En la primera imagen se ve a Nury en un plano aéreo sobre un material textil con un gorro, al parecer de natación, color negro. Está sobre este material y con sus pies enrosca hacia si misma la tela y sus manos parecen maniobrar un timón, comprimiendo la escena con esta posibilidad análoga, de iluminación simple y un tentativo diseño sonoro más cercano a lo ambiental. Es muy cautivador este momento que nos invita a continuar en esta huida de Gutés.

A continuación, sigue la aparición de materiales textiles en movimiento, con una preocupación por el valor cromático del vestuario y los elementos utilizados. Aparece una pieza musical más “ancestral”, con mandatos de piano y este nudo acuático que se perpetra en la escena con movimientos de brazos y manos, como preparando un nado casual.

Ya en la tercera parte, podemos entrar en la forma en que la bailarina se relaciona con el espacio. La Sala Negra está ahora desnuda frente a la cámara. Gutés avanza por el lugar entregándonos imágenes que retornan a su cuerpo, en un lugar específico, desdoblando oscilaciones entre los materiales del lugar, rectangulares, fríos, esta vez de poca iluminación. Nuevamente nos da la sensación, como puntualizamos hace unas semanas atrás, de ser cualquier lugar o locación jurada. Gutés logra darle sentido a la ausencia del acto en directo plasmado en este video. Las escenas no dependen de un híper montaje, sino de la capacidad de recorrer el lugar y asumirlo como posibilidad escénica en cuanto cuadros y movimientos.

Esperamos, sinceramente, poder conmovernos con más ciclos como este durante el tiempo que viene. Lleno de incertidumbres para las artes escénicas que respiran gracias al público, pero que han sabido amoldarse y adaptarse a nuevas formas de exhibición. Con esta reflexión de Nury Gutés, cerramos los Ciclos Vitales de Centro NAVE y Sala de Máquinas:

“Para la danza el espacio se puede tocar en una arquitectura de luz y oscuridad, ella aparece sin decir palabra y sin saber hablar nace y anuncia lo que se avecina, habita todas las nostalgias sin describir ninguna” N.G.

Todas las transmisiones en el canal de YouTube e IGTV  de Nave Tv y Sala de Máquinas.

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Imagen: Ciclos Vitales, en escena Nury Gutés. Fotografía de Fernanda Ruiz @efe.ruiz