Editorial: HiedraTV, internet y el campo hostil
A través de nueve cápsulas de video en Full HD y un diseño que nos llena de orgullo, lanzamos HiedraTV en nuestro canal de Youtube.
Desde que nació el proyecto que dio vida a esta revista, año y medio atrás, nos han faltado manos, tiempo y recursos para hacer realidad todo lo que tenemos en mente. Varias veces hemos pensado cómo hacer llegar el mensaje que queremos transmitir con lo que tenemos, sin jugar a romper esquemas, sin hacer pedagogía, sin levantar o bajar pulgares, luchando contra una lógica que comienza con la brutal (in)visibilización de internet y que termina exactamente igual, con las butacas vacías de los teatros.
Y si el público teatral ya es reducido, imagínese entonces cuántos se interesarán en leer algo sobre una obra que ya vio (o verá) o sobre los avatares de un campo tan frágil como hostil. No decimos nada nuevo. Porque por más que algunos circuitos del primer mundo así lo aparenten, no hay país habituado a la crítica de arte, ni al pensamiento crítico, ni a nada crítico en general.
A lo que si estamos habituados es a pensar la crítica como se pensó hace más de un siglo. Por eso en algunos espacios si el autor no adjunta un mamotreto con bibliografía, no tiene validez. O al contrario, si no va directo al grano (es decir, no decide si es buena o mala tal o cual obra), estamos mal.
Muchas veces el teatro quiere ser crítico, pero espera de la crítica que opere como oficina de partes y credenciales para compañías que quieren abultar su portafolio y aumentar sus chances de viajar por festivales nacionales o internacionales.
Eso por una parte. Pero, ¿y qué hay de internet y sus algoritmos del desprecio? ¿Qué hay de sus centinelas que operan posicionando webs y enviando a otras al olvido? ¿Qué hay de la posibilidad de grandes medios de corromper la «lógica pura» del algoritmo maestro y sobornar a la máquina para hacer visible lo invisible?
Pues bien, con todo esto en mente, en algún minuto de este viaje entendimos que incluso para transmitir un mismo mensaje, había que repensar su forma y todas sus lógicas de circulación. Y tal vez de eso se trate todo.
Pero, ¿cómo se hace eso? ¿Cómo entrar al juego sin caer en él?
Ha sido difícil. Y lo seguirá siendo. Pero ya no hay marcha atrás. Necesitamos pensar nuevos espacios, nuevas formas y nuevos canales para entregar el mismo simple mensaje: no basta con invitar a la gente al teatro, hay que pensarlo, reflexionarlo, dudarlo, di-sentir e insistir.
Y es por esto es que hoy es un gran día para nosotros, pues al fin hemos dado forma a una de esas ideas que veníamos pensando hace rato: lanzar HiedraTV. A través de nueve cápsulas de video en Full HD y un diseño que nos llena de orgullo, hemos dado un paso más en la visibilización y reflexión de los distintos actores del campo. Hace unos meses lo hicimos en una entrevista escrita donde abordamos el trabajo de los diseñadores escénicos y su rol en las artes escénicas. Hoy lo hacemos con los estudios vocales.
Luis Aros, actor y docente, es el fundador del Núcleo de Investigación Vocal, instancia que nace de la necesidad de «darle luz a las practicas vocales y entender la voz más allá de una arista técnica y metodológica en la formación del actor, para entenderla como un lugar estético y filosófico de una puesta en escena».
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